El piloto argentino Franco Colapinto no pudo completar su vuelta decisiva en la Q1 del Gran Premio de España debido a un fallo en la transmisión de su Alpine A525. Cuando salía del pit lane para montar neumáticos nuevos y realizar su último intento, el auto no pudo engranar la primera marcha, obligándolo a detenerse antes de completar el giro. Esto lo dejó fuera de la Q1 y lo condenó a la parte baja de la parrilla.
En los entrenamientos libres, Colapinto había mostrado un ritmo prometedor, incluso llegando a marcar tiempos que lo colocaban cerca del corte para la Q2. Sin embargo, la avería durante la clasificación arruinó todas sus opciones de mejorar posiciones. Visiblemente frustrado, el piloto admitió que “fue algo de la caja o el embrague” y se mostró consciente de la importancia de adaptarse lo antes posible al Alpine A525, un monoplaza diferente a los que condujo en 2024 con Williams.
Como consecuencia de esta falla, Colapinto partirá mañana en el puesto 19° en el circuito de Barcelona-Catalunya. Saldrá penúltimo, justo por delante del Red Bull de Yuki Tsunoda, con la necesidad de recuperar terreno desde el inicio. Dado que arrancará con neumáticos blandos ya usados, su estrategia pasará por aprovechar cualquier incidente tempranero en la zona media-baja y por realizar una parada temprana para intentar ganar posiciones en pista limpia.
Con apenas 22 años cumplidos hace unos días, Colapinto encara esta carrera sabiendo que su adaptación al Alpine todavía está en curso. Pese a la adversidad, el argentino mantiene la calma y confía en que, con una buena lectura de la carrera, un stint inicial agresivo y la posibilidad de algún coche de seguridad, logre remontar y sumar sus primeros puntos con el equipo francés. La carrera está programada para el domingo 1 de junio a las 10:00 (hora de Argentina), y Colapinto buscará transformar esta frustración en una actuación destacada que refuerce su futuro en la Fórmula 1.