El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado por el Banco Central reflejó un nuevo ajuste en las proyecciones de inflación por parte de economistas y consultoras privadas. Para abril, se espera un incremento del 3,2% en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), en un contexto donde aún se perciben los efectos del salto inflacionario de marzo y del nuevo esquema cambiario.
Por primera vez en lo que va del año, las estimaciones de inflación anual superan el 30%, ubicándose en un 31,8% para 2025. A pesar del reciente aumento del dólar oficial —que subió casi 9% en abril tras la flexibilización del cepo—, el mercado anticipa una desaceleración en las subas de precios a partir de mayo, con una inflación mensual cercana al 2% entre junio y octubre.
En cuanto al tipo de cambio, los analistas prevén un dólar oficial a $1.171 para fines de mayo y a $1.322 hacia diciembre de 2025. Esta proyección refleja un ajuste al alza respecto del REM anterior y una variación interanual estimada en 29,5%. La reciente modificación del régimen cambiario, en el marco del acuerdo con el FMI, introdujo una banda de flotación con un piso de $1.000 y un techo de $1.400.
El informe también relevó expectativas sobre otros indicadores clave. El Producto Bruto Interno (PBI) crecería un 5,1% en comparación con 2024, mientras que la tasa de desocupación bajaría del 7% al 6,5% hacia fines de 2025. En el frente externo, se proyecta un superávit comercial de casi u$s10.000 millones, con un leve aumento de las importaciones y una reducción en las exportaciones previstas.