Con 35 votos en contra y 36 a favor (se necesitaban 37 votos a favor para que se apruebe la ley), el Senado rechazó el proyecto de ley de “Ficha Limpia”, que pretendía impedir que personas con condenas por corrupción en segunda instancia accedan a cargos electivos. La iniciativa, promovida por el oficialismo y ya aprobada en Diputados, fue bloqueada principalmente por el bloque kirchnerista y aliados provinciales. Se destaca el voto de los dos representantes de Misiones, que rechazaron el proyecto a último momento.
El trasfondo del debate estuvo marcado por la situación judicial de Cristina Fernández de Kirchner, condenada en 2022 por corrupción, aunque sin sentencia firme. Para el peronismo, la propuesta tenía nombre y apellido. Para el Gobierno, el revés en la Cámara Alta fue una muestra de que “la vieja política” sigue frenando reformas de integridad institucional.
El proyecto había logrado media sanción en febrero con amplio respaldo en Diputados (144 votos a favor), pero la discusión en el Senado dejó al descubierto la polarización que rodea toda agenda vinculada a la corrupción. Por ahora, Ficha Limpia queda archivada, y Cristina podría ser candidata en las próximas elecciones nacionales.